Ayer fuimos a una salida en golondrina organizada por GEPEC. Salimos del puerto de Tarragona con un día malo de llovizna y mala luz. La gente cogía asiento y los fotógrafos sacaban sus armas, uno de ellos abría su maletín y desenfundaba un bazooka Sigma 50-500mm, que, poniéndole el parasol, sólo faltaba un trípode en medio del barco para parecer un puesto de artillería. Al poco rato de salir ya empezamos a echar los primeros trozos de pescado para atraer las primeras gaviotas sombrías (Larus fuscus) y reidoras (Larus ridibundus). Posadas en el puerto descansaban más gaviotas sombrías.
Larus melanocephalus adulto con plumaje de invierno mudando a verano.
Larus ridibundus con plumaje de invierno
Larus ridibundus ¿2o invierno?
Larus fuscus y Larus melanoce
Larus fuscus
Ya un poco más alejados de tierra Oriol y más tarde otras personas vieron durante una milésima de segundo delfines, y las primeras pardelas -baleares y una mediterránea- (Puffinus mauritenacus y P. yelkouan) ya se dejaban ver siguiendo el barco en paralelo. También se comenzaba a ver algún alcatraz atlántico (Morus bassanus) y gaviotas cabecinegras (Larus melanocephalus), una de ellas anillada (me dí cuenta ayer revisando fotos...).
Morus bassanus
Puffinus mauritenacus y Puffinus yelkouan
Puffinus yelkouan
Puffinus mauritenacus
Puffinus mauritenacus
Larus melanocephalus con anilla blanca y azul
A lo lejos, Albert Cama localizaba un págalo parásito (Stercorarius parasiticus) persiguiendo a una gaviota. La cosa se iba animando a medida que nos alejábamos de la costa. Una de las estrellas de la jornada fue un págalo grande (Stercorarius skua), que se unió al bando de gaviotas que nos seguían desde la salida. ¡¡Pasó a dos metros nuestro!!
Stercorarius skua
Larus melanocephalus
Larus fuscus
Ahora le tocaba el turno a otro alcatraz atlántico, que nos siguió bastante rato y nos regaló dos flechazos-zambullidas. Espectacular. También se dejaba ver una gaviota sombría leucística (vulgarmente denomidado "parcialmente albino").
Morus bassanus
Larus fuscus leucística
Ya de vuelta se nos unía otra pardela balear. Volaba, se zambullía una primera vez a escasos metros detrás del barco, salía a la superfície, volvía a zambullirse al estilo cormorán, reposaba un rato en el agua y cuando se había alejado ya el barco, volvía hacia nosotros a zambullirse. Otro espectáculo.
Puffinus mauritenacus
Entrando en el puerto una gaviota de audouin (Larus audouinii) y un charrán patinegro (Sterna sandvicencis) se despedían de nosotros.
Larus audouinii
Sterna sandvicencis
Phalacrocorax carbo con anilla metálica
A las 12h llegamos tierra firme. Comimos en un bar cercano y por la tarde nos acercamos a la playa y al embalse de Riudecanyes, lugar que se convertía al atardecer en un dormidero de miles de gaviotas cabecinegras.
En la playa preparamos un rico manjar de pan con agua para atraer las 3 o 4 gaviotas (reidoras y cabecinegras) que había, entre ellas una cabecinegra con anilla roja HE21, anillada en Hungría.
Larus melanocephalus anillada en Hungría
Larus melanocephalus con plumaje de invierno.
En el embalse de Riudecanyes, a partir de las 16h empezaron a llegar las primeras gaviotas cabecinegras, hasta formar una nube bastante grande. También se vieron: cernícalo vulgar macho (Falco tinnunculus), estornino (Sturnus spp.), agateador común (Certhia brachydactyla) escuchado, gallineta común (Gallinula chloropus), y bandos de numerosos passeriformes, por lo que comentaron puede que pinzones vulgares (Fringilla coelebs) La poca visibilidad por niebla y la llovizna nos echaron a la mayoría del grupo a eso de las 17h.
Larus melanocephalus
Columba palumbus y Falco tinnunculus
